Review – Dragon Ball: Sparking! Zero

DESARROLLADOR: Spike Chunsoft
PUBLISHER: Bandai Namco
FECHA DE LANZAMIENTO: 10/10/2024
Si tuviésemos que hacer una tier list de juegos sudacas, y quédense tranquilos que ya la vamos a hacer, es imposible no rankear bien arriba al Budokai Tenkaichi 3. Un juego cuyo nombre resulta tan icónico que no hace falta ni aclarar que estás hablando de Dragon Ball, el subtítulo toma una trascendencia al nivel de la franquicia que lo acompaña. Este emblema absoluto de la PlayStation 2 estuvo en el 100% de los estuches porta-CD de la generación, porque era un juego realmente infaltable: el summum de una seguidilla de grandes éxitos como fueron los primeros tres Budokai y los dos primeros Budokai Tenkaichi (el “Tenkaichi” extra dando la pauta de que saltamos al 3D, o por lo menos así nos llegó en occidente).
17 años después de su lanzamiento, no hubo ni un solo juego de Dragon Ball que esté realmente a la altura, por lo menos de los que intentaron no desviarse del género Arena Fighter. Pasaron los años y en vez de migrar a juegos más modernos, el fanático de Dragon Ball siguió proponiendo Budokai Tenkaichi 3 en las juntadas de amigos para romperse el marulo un rato. A veces era el BT3 original, tal cual lo jugaste en la Play. A veces era la versión con voces en latino, un trabajo a pulmón de los fanáticos, tal como las versiones “modernizadas” con personajes que aparecieron en la historia una década después del lanzamiento inicial del juego, o las bizarras con grandes invitados como Kratos, Tablón, El Rayo McQueen, y Shaggy.

Realmente no hubo un solo digno sucesor que pueda capturar la magia del gameplay de Budokai Tenkaichi 3 y trasladarlo a la modernidad sin sacrificar su roster inmenso y su balance NULO que priorizaba la lógica interna del universo Dragon Ball por sobre la experiencia equilibrada de un juego de pelea. Me complace muchísimo poder formular esta oración en tiempo pasado, porque hoy podemos disfrutar de la joyita que es Sparking! Zero, el heredero que tanto esperamos.
¡¡¡¡¡Se tenía que morir Toriyama para que hagan un juego con amor en serio viejo!!!!!
Desde su anuncio, Sparking! Zero (que para nosotros se podría llamar Budokai Tenkaichi 4 tranquilamente, solo que mantiene el nombre “Sparking” que llevaban los anteriores originalmente en Japón) prometía devolvernos toda la experiencia de BT3 y amplificarla gracias a los avances visuales y de la historia misma de Dragon Ball, lo cual implicaría un roster más diversificado y actualizado para incluir los personajes de Dragon Ball Super y demás. Son unos zapatos gigantes para llenar: como decía al principio, Budokai Tenkaichi 3 fue un juego trascendental que encapsuló a un nivel superlativo el arte de inundarnos de contenido con poquita sustancia. Con el ojo crítico de 2024, uno puede argumentar que de los 161 personajes hay fácil 2 tercios que comparten movimientos extremadamente genéricos como los famosos “Onda de Poder Máximo”, “Ataque de Velocidad”, “Ráfaga Volley al Máximo” y “Súper Onda Explosiva”… ¡Pero eran 161 personajes! ¡Estaba hasta Octavio! ¡Nam! ¡Máquina Pilaf! ¡¡¡APPULE!!!
También podemos plantear que el modo historia es basiquísimo y que no se calentaron ni en hacer media cinemática… Pero están Dragon Ball, Dragon Ball Z, Dragon Ball GT, las películas, ¡y hasta una saga What If!
Lo importante de Budokai Tenkaichi 3 es que había de todo, después si estaba bueno en mayor o menor medida lo dejábamos pasar, la realidad es que tampoco abundaban los juegos de Dragon Ball donde podíamos fajar a nuestros amigos con Tao Pai Pai, así que tomábamos lo que podíamos.
Entonces, ¿cómo logras lo que logró BT3 en su época sin ser víctima de las expectativas modernas? ¿Cómo modernizás la experiencia Budokai Tenkaichi para un público que está viendo a ese añorado juego casi cumplir la mayoría de edad?
No lo haces, me vendes el mismo juego pero aggiornado, no le des mucha más vuelta.
Los trailers lo vaticinaron, los accesos anticipados lo confirmaron, y el lanzamiento del juego lo ratificó: Sparking! Zero es el mismo juego que jugaste de pibito, y se ve tal cual creías que se veía en esa época, cuando decías “¡No hay forma de que hagan un juego que se vea más parecido a Dragon Ball que esto!”. No son muchas las oportunidades en las que un juego te hace la transmisión instantánea de nuevo a tu infancia, y lograr eso es algo realmente destacable. Se que hay alguno que otro que puede pensar que esto es vago, que tendrían que haber modernizado el sistema de combate y darnos un juego distinto, pero permítanme discrepar. Hay un argumento para hacer, tal vez material de algún ensayo más especializado, respecto a los “remakes” y la fidelidad al material original VS la modernización.
Sparking! Zero en esencia mantiene todo lo que tenían los Budokai Tenkaichi originales, desde el combate hasta varios de los movimientos de los distintos personajes. Tan así, que en cuanto tuve el juego en las manos y probé tirar mis primeras trompadas los combos salían naturalmente, y de memoria muscular pura desencadenaban en los supermovimientos que mi mente esperaba iban a aparecer tras tocar cierta combinación de botones. Sí, hay algunas mecánicas nuevas para aceitar el gameplay, y son bastante bienvenidas, pero no hay ninguna duda que el que sabía jugar Budokai Tenkaichi 3, hoy, 17 años más tarde, puede cosechar los frutos de todo ese entrenamiento. DBSZ logra sentirse, mecánicamente hablando, como una secuela que salió tan solo uno o dos años después del BT3. Hasta lo sentís vintage porque pesa unos míseros 27 gigabytes, algo impensado en la época de los 100 GB por juego.

Con el sistema de combate, la base de su gameplay, ya cubierto: ¿qué queda para todos los demás chiches del juego? Bueno, es innegable que, como mencionaba antes, uno de los grandes atractivos de la saga Tenkaichi es el enorme roster que incluye personajes desde los más queridos hasta los más injunables. Sparking! Zero sale al mercado con 182 personajes, la promesa de que vienen más de 20 en el primer Season Pass, y prácticamente garantizándonos, si el modelo post-lanzamiento de Kakarot y Xenoverse 2 se mantienen, unos cuantos años de DLC extra, por lo cual en dos o tres años podemos estar hablando de un roster de fácilmente 230 o 240 personajes. Si no estás familiarizado con Dragon Ball, te aviso que incluso con esos números la gente le va a encontrar la vuelta para quejarse porque no está su personaje favorito, pero bueno…
Casi todos los personajes de BT3 volvieron para Sparking! Zero, con los pocos que quedaron afuera dejando lugar para aquellos personajes que no existían en la época de la entrega anterior, y algunos probablemente quedando afuera estratégicamente para ser DLC de pago más adelante (Tao Pai Pai, Piccolo Daimaku, Super 17, Nuova Shenron). Es importante agregar también que, si bien la gran mayoría de los movimientos de los personajes repetidos se mantienen, muchos de los que no gozaban de habilidades distintivas fueron modificados, reduciendo drásticamente la cantidad de “Onda de Poder Máximo” que vamos a ver comparado con la anterior entrega. Siguen existiendo, sí, porque está bastante jodido armarle un moveset a los Saibaman que lo único que hacen es explotar, pero se tomaron medidas extra para asegurarse que los personajes con menos material puedan exprimir hasta lo último de sus posibilidades.
Otra de las virtudes de BT3 que la gente adoraba era la atención al detalle, algo que no solo hacia a cada personaje parecer un reflejo perfecto de su versión del manga o el anime, sino que también nos daban interacciones entre ellos antes de las peleas con diálogos especiales (en otras palabras: no inventaste nada, Mortal Kombat). Esto se mantiene y se amplifica en Sparking! Zero, y constantemente vas a descubrir interacciones específicas ya sea en ataques que funcionan de formas únicas si ocurren entre personajes puntuales, diálogos pre-batalla, o comentarios al seleccionar ciertos equipos.

Más arriba comentaba que una de las falencias de BT3, sobre todo comparado con su predecesor, era el modo historia. Sparking! Zero sin dudas ofrece algo superador a BT3 en calidad, pero cambia el enfoque de la cantidad al dejar de lado la cobertura de ciertos cánones de la franquicia para priorizar algo totalmente distinto…
Resulta que en DBSZ, a diferencia del 90% de los juegos de Dreagon Ball, no vamos a jugar el modo historia de forma cronológica empezando con Raditz y dándole para adelante, sino que arranca ofreciéndonos un pequeño abanico de personajes clave como Goku, Vegeta, Piccolo, Gohan y Freezer entre otros. Al seleccionar uno de estos personajes, vamos a vivir la historia cronológica pero puramente desde su perspectiva. Esto quiere decir que, por ejemplo, Goku va a participar poco y nada de la saga de Cell, peleando contra Androide 19 al principio y reapareciendo para los Juegos de Cell prácticamente al final de todo. Si no conoces la historia de Dragon Ball, acá no la vas a entender ni por asomo, ni tratando de atar los distintos personajes. La verdad es que el juego está pensado para el fanático, y por ende asume constantemente que vos ya sabes lo que pasa en la historia y da enormes saltos entre una cosa y la otra para que puedas participar de los momentos icónicos y no te cuelgues mucho con peleas más irrelevantes.
A diferencia de BT3, no tenemos ni GT, ni Dragon Ball original, ni las películas, pero tenemos Super y una serie de eventos “What if” que van desde pequeños finales alternativos que no son más que una cinemática a arcos paralelos donde vemos un desenlace totalmente distinto que abarca uno o dos arcos regulares de la historia. En definitiva, una experiencia distinta pero bastante agradable, que al principio da la sensación de ser cortísimo por los saltos que pega, pero resulta enorme cuando uno considera los distintos personajes que hay para elegir y la diversidad de eventos paralelos a los que podemos acceder. Como alguien que ha jugado a casi todos los juegos de Dragon Ball, prefiero esto que repetir toda la historia en orden como vemos usualmente.
Che… ¿No hubiese estado bueno si hacían un What If en el que Mr. Satan tiene que detener a Broly, a Bills y a Cabba SSJ2? Sí, hubiese estado muy bueno… Igual si querés lo podés hacer vos. Claro, porque existe un modo para crear tus propios escenarios de la historia.

Las Custom Battles son totalmente nuevas para la franquicia, y este interesantísimo modo nos permite armar nuestro propio escenario con diálogos pre-armados (hay más de 5000, quedate tranquilo), condiciones específicas, eventos guionados, y hasta un leve control de las cinemáticas que se pueden dar antes, durante, y después de la pelea. Si bien el techo de lo que se puede hacer con este modo todavía no se ha tocado, y seguro el DLC va a agregar varios detalles extra que lo van a enriquecer aún más, es una forma muy entretenida de poder recrear ciertas peleas que sentimos quedaron fuera de la historia del juego, o escenarios que vivieron en nuestra cabeza y ahora podemos compartir con el mundo. Personalmente, como no vi representada la batalla de Bardock contra las fuerzas de Freezer, me encargue de recrearla con una secuencia en la que batallamos con distintos soldados de su ejército hasta que eventualmente Freezer aparece y, claro, nos mata. Cortito y al pie, como para probar el sistema, y quedé realmente muy sorprendido con las posibilidades que algunos con más dedicación van a explorar para realmente sacarle el jugo a este modo.
En la larga lista de detalles que han evolucionado entre BT3 y Sparking! Zero esta también la Enciclopedia, con todos los personajes y un breve comentario que originalmente daba Chi-Chi por si sola y ahora hace acompañada de Bulma y Videl. Tenemos también la posibilidad de customizar levemente al roster, con las Cápsulas que cumplen el rol de los antiguos Potara para modificar sus habilidades, y en los casos más afortunados con distintos trajes o accesorios. La realidad es que, por lo menos a como está el juego en este momento, si no te llamas Goku o Vegeta lo más probable es que tu personaje no tenga ningún traje alternativo, ni siquiera un cambio de paleta, lo cual es una lástima (y un garrón cuando te toca un mirror match online)
¡Cierto, el online! Algo que en BT3 era casi que nulo (lo tenía la versión de Wii, pero buena suerte jugando online ahí), DBSZ ofrece los típicos lobbies para jugar con amigos y armar nuestros propios torneos, así como también ofrece peleas rankeadas, las cuales podemos disputar en formato 1v1 o en equipos con un sistema de puntuación que busca catalogar a todo el roster asignándoles un valor entre 1 y 10. 15 puntos en total y repartí como más te guste: si sos bastante verde vas a gastarte una fortuna en algún Gogeta y te vas a quedar con puntos como para un Chaoz o Ten Shin Han y listo. Los que ya le agarraron la mano salen a la cancha con Videl, Pan, Dr. Wheelo, Yajirobe, y Spopovich. Te van a romper la cabeza, en serio.

Ojo, que no todo son flores para Sparking! Zero. Si bien como decía al principio es un claro sucesor de BT3 y, si me apurás, te digo que lo supera en casi que todo, hay un par de cuestiones donde todavía le falta un poquito más.
El OST es bastante normalito, salvo algunas canciones puntuales que están muy buenas, la gran mayoría resultan un poco genéricas y nos hacen extrañar las bandas sonoras anteriores. Esto, de todos modos, no es nada que los modders no puedan solucionar.
El limitadísimo versus local, que nos da split-screen SOLAMENTE en la Habitación del Tiempo (dicen los desarrolladores que por “limitaciones tecnológicas”) prácticamente aniquila una de las experiencias más lindas que podemos recordar de BT3: rompernos la cabeza con nuestros amigos en el sillón. Hago extensión esta crítica al modo Torneo, que ya no tiene función offline y te obliga a armarte el bracket vos mismo en casa, algo relativamente menor pero que va de la mano con la imposibilidad del juego de ofrecerte en lanzamiento siquiera el stage del Torneo. Esto, de todos modos, no es nada que los modders no pue– ¿wow ya modearon esto? Que rápido.
La selección de stages es corta, y si bien no me caben dudas que más aparecerán como DLC, es inevitable sentir que el juego se lanza con varios grandes ausentes como la nave de Freezer, los glaciares, o alguno representativo de GT como el planeta Tuffle. Si, ya sé, ya están modeando esto también, pero los stages que tenemos en el juego están realmente muy bien hechos, por lo que ver los ausentes realizados al mismo nivel de fidelidad sería un golazo.
El tutorial es bastante malo para enseñarte el juego, y si no tenés algo de experiencia con Budokai Tenkaichi 3 es muy probable que estés en pelotas. Va a resultar necesario verse uno o dos videos de YouTube para terminar de entender bien las mecánicas si querés adentrarte un poco más que solo mashear cuadrado, lo cual recomiendo altamente porque, dentro de lo que son los Arena Fighters, Sparking! Zero es bastante más complejo de lo que parece.

La ausencia de trajes o siquiera palette swaps se siente un poco vaga, aunque seguramente con el lanzamiento de distintos DLC esto deje de ser un problema, no quita que hay varios atuendos que a esta altura del partido podrían estar en el juego base tranquilamente y no hacértelos pagar más tarde. Que no haya ni una paleta de colores alternativa por personaje siendo que esto ya existía en todos los Budokai Tenkaichi anteriores también es un poco flojo, y siento que es el tipo de customización que no debe costar mucho implementar y ayudaría bastante a darle un poquito más de distinción sobre todo a aquellos personajes que no tienen ningún traje alternativo, ni accesorios, ni nada del estilo. De yapa, en lo que respecta a customización, noté que solamente un traje de Androide 18 y uno de Goku afectan tus habilidades, cambiando un movimiento en específico por otro. Parece que acá hay una mecánica que quisieron implementar y no se pusieron muy de acuerdo si quedaba o no, porque el caso de Goku corresponde al traje de Goku (Super) con el Báculo Sagrado, un bonus de la edición Ultimate, mientras que el de Androide 18 es el único caso del juego base porque es el traje que usa durante… ¿La peli de Bio-Broly? No sé, es medio raro, pero ojalá tengamos más trajes que modifiquen las habilidades de los personajes para mejor reflejarlos de acuerdo con su indumentaria. Esto, de todos modos, los mods, si, ya hay varios.
Algunos capítulos de la historia parece que no les pusieron muchas ganas tampoco, y algunos personajes cortan sus sagas abruptamente: Vegeta por alguna razón llega hasta la saga de Buu y no tiene nada de Super. Entiendo que el 90% de las peleas de Vegeta en Super son las mismas que tiene Goku, está bien, pero creo que hubiese preferido jugar lo mismo, pero desde la perspectiva de Vegeta y no quedarme pensando “¿qué pasó acá?”.
Los lobbies, la función de búsqueda, y todo lo que rodea al online necesita una pulida más. Pequeños detalles como un sonido que te avise cuando es tu turno en un lobby o guardar ciertos settings para no tener que elegirlos cada vez que entramos suman muchísimo y por alguna razón no están en el juego (curiosamente en Tekken 8 pasó lo mismo, por suerte se arregló). Por otro lado, y aún más polémico: el juego no cuenta con crossplay, algo que ya en 2024 tendría que ser estándar.
En definitiva, aunque le falta un último empujoncito para terminar de llegar a ese 10 (y reconozco que muchas de esas cosas todavía pueden llegar, pero la reseña es de HOY), Sparking! Zero ofrece una experiencia llenísima de fan service y cumple con lo que prometió desde su anuncio: devolvernos al Budokai Tenkaichi 3. Si entras buscando un típico modo historia y no mucha más vuelta, estás en el juego equivocado. Si entras buscando Budokai Tenkaichi 4 (o Budokai Tenkaichi 3: 2), estás en el lugar perfecto. Con sus falencias, tanto las que enumeré como las que dejé pasar (bugs pequeños y cosas así), nada me quita la sensación de que estoy jugando como cuando era un chavalito, arrastrando ese conocimiento que guardé muy en el fondo en un baúl de mi memoria muscular y que ahora vuelve a las canchas dispuesto a ser mejor que nunca, superarse, y enfrentarse a los nuevos desafíos que depara el futuro… Como hubiese querido Akira Toriyama.

Gracias a Bandai Namco por la clave de reseña.

Jefe de redacción, músico profesional, experto en juegos de pelea.