Review – Superliminal

DESARROLLADOR: Pillow Castle
PUBLISHER: Pillow Castle
FECHA DE LANZAMIENTO: 05/11/2020 (Steam)
Pareciera ser que hoy en día los juegos de puzzles están infravalorados y que muchos son “más de lo mismo”. Lo cierto es que, luego de joyitas como The Witness, Stanley Parable o la mítica saga Portal, el género tiene la vara un poco más alta al haber menos oferta de los mismos. O por lo menos de los que valgan la pena. Aunque esto no es ningún impedimento para Superliminal de Pillow Castle, una propuesta que trata de lograr ese status de “atemporalidad” como los éxitos recién mencionados, con una trama inquietante pero que flaquea en algunos aspectos básicos típicos de un juego de este estilo. ¿Será suficiente como para lograrlo?
Superliminal es, como bien dije, un juego de puzzles en primera persona con una regla de base: en este mundo, la percepción si que es realidad. ¿A qué nos referimos con esta afirmación? Básicamente todo lo que vemos es real, por más loco o fumado que pareciera. Y eso es gracias a que estamos sumergidos en nuestro propio sueño producto de una sesión terapéutica realizada en un instituto médico, con la única diferencia de que tenemos total control de lo que hagamos en él… o eso nos hacen creer. Realmente quiero hacer un análisis sin meterme a fondo con lo que sería la trama y tirar algún que otro spoiler, ya que esta suerte de “psicoanálisis” con naturaleza interactiva es, para mí, uno de los puntos más fuertes que tiene, siendo el motor necesario que necesitamos para ir navegando a través de nuestro subconsciente y revelar qué es lo que esconde.

Pasemos a lo que sería el esqueleto de dicho experimento: los puzzles. Al poder jugar con la perspectiva a nuestro antojo, las posibilidades suenan infinitas cuando las vemos escritas en papel pero, llevado a la práctica, a Superliminal se le acaba la nafta a medio camino. Y no me malinterpreten, algunos de los puzzles están excelentemente logrados y te dejan pensando un buen rato. Lo malo de la cuestión es que estos mismos escasean o son reutilizados una y otra vez a lo largo del juego, lo que hace que las soluciones sean un poco obvias a simple vista al momento de entrar a determinadas habitaciones, encontrando rápidamente el objeto con el que tenemos que interactuar ya que es, irónicamente, el único objeto interactuable.
A esto se le suma la falta de creatividad con las herramientas que Pillow Castle nos pone a disposición. Da la sensación de que esta idea de jugar con la perspectiva podría haberse exprimido muchísimo más de lo que vemos retratado en la corta duración de Superliminal, pero por algún motivo no sucedió, lo cual es una lástima y una pérdida de potencial tremenda. Aún así, esos puzzles que salen de la media y resultan ser originales hacen que la experiencia sea llevadera y lo convierte en algo gratificante al final del día. Nunca le vamos a decir que no a un juego del género que no utiliza los ya quemadísimos “Simon Dice” o conectar los cables de colores. Estamos podridos de esos, dejen de robar con eso por unos años al menos.

Superliminal no resalta para nada gráficamente, siendo un juego que se ve “okay” para estándares de hoy y, para ser honestos, no es lo que nos interesa acá tampoco (por no decir que realmente nos chupa un huevo). Lo realmente interesante acá es el laburo increíble en el detrás de escena, siendo la pata fundamental para hacernos creer nuestra manipulación de la perspectiva y que se sienta real. Obviamente tiene algún que otro bug que podemos llegar a divisar, pero hay que destacar lo pulido que se encuentra en lo técnico. El apartado sonoro es para resaltar también, con música suave digna de un juego del género, la cual te deja pensar en tranquilidad mientras te comes las uñas pensando cómo resolver el problema frente a tus ojos.
Otro punto fuerte en el que quiero hacer énfasis es el guión y el voice acting, dos cuestiones que se ejecutan de manera magistral, y desembocan en múltiples carcajadas y hasta un tanto emocional llegando al final de la historia. Sin dudas otro puntito a favor en ese aspecto.

Conclusión
Superliminal es realmente una propuesta diferente dentro del género de puzzles, con una historia que trata trascender por encima de lo cómico o bizarro para tocar puntos reales y profundos. Puzzles originales que son el resultado de una visión poco explorada como es la “perspectiva” en este tipo de juegos, aunque se queda corto de ideas a mitad de camino y, a mi gusto, no logra exprimir al máximo la temática. Aún así, una historia simple pero efectiva que es acompañada de un apartado audiovisual digno y un guión sólido hacen que la experiencia sea indudablemente recomendable para los amantes del género.

Gracias a Pillow Castle Games por la clave de reseña.

Redactor, coleccionista y amante de los speedruns. Todo arrancó con una Nintendo 64.