Review – Sleeping Dogs

¿Quién no se cagó a trompadas alguna vez? ¿Quién no se emocionó al ver dos personas pelearse? O para los más petes: ¿quién no vició con un fichín de peleas? Si tuviésemos que nombrar, empezaríamos por los clásicos Beat’em Up de desplazamiento lateral. Estos tuvieron su esplendor en los 90’s con los salones de arcade hasta la poronga, con el olor a bolas de los pibes que venían a viciar mezclado con el perfume de Paco/Pibes, haciendo que sea un género que guste a cualquiera que tenga una noción básica de los videojuegos. Con la llegada de las nuevas consolas y el gran avance que hubo en los últimos 15 años, poco a poco los arcades fueron dejados de lado (salvo por algunas excepciones) para dar paso a las nuevas consolas con una potencia técnica incomparable.  

La previa

Sleeping Dogs nos ofrece un sistema de pelea copado y mucho más que eso, así que valdrá la pena reseñarlo. En principio Activision era el responsable del desarrollo del fichín, llamado True Crime: Hong Kong, anunciado por la empresa en 2009 como parte de la franquicia True Crime. El juego tuvo varios quilombos encima, retrasos en fechas, problemas en los desarrolladores, lo que hizo que se cancelara a mediados de 2011. ¿Y qué pasó? Llego Square Enix con sus millones y le compró los derechos de publicación a Activision y en conjunción con United Front Games con la filial inglesa de Square Enix se encargaron de darle unas cuantas vueltas de tuerca, aceitarlo un poco, pulirlo, lustrarlo, escupirlo y pasarle el trapito para dejar la pinturita que es hoy en día (hay que aclarar que solamente Square Enix le compró los derechos de publicación y no los de la franquicia True Crime que es otra cosa, por lo que tuvo que ser renombrado con el nombre que ya conocemos).

La historia

Ciertamente a la hora de tener un juego donde la premisa básica sea cagarnos a trompadas, la historia puede dejarse pasar por alto, pero tampoco ser una bosta sin sentido. El juego adapta una historia bastante sencilla, pero que asienta bastante bien a los que se tomen el tiempo de apreciarla. Wei Shen es un policía proveniente de San Fransisco que viaja a Hong Kong para participar en un operativo de encubierto contra las famosas triadas, la cagada es que, en un trato de compra de falopa, cae la yuta y lo meten derecho a la comisaría. En el interrogatorio salta la ficha de que es un policía y que entro en la cárcel a propósito para encontrarse con Jackie Ma, un miembro de la banda más pulenta de Hong Kong, la Sun On Yee, y su amigo de la infancia. De esta manera consigue entrar en la banda, y escalando desde lo más bajo, Wei tendrá que hacerse de una posición privilegiada en las triadas, haciendo trabajos sucios para ganarse la confianza de los cabecillas y finalmente poder atraparlos a todos (como los pokemones). Todo esto ambientado en un Hong Kong bastante bien logrado, con giros en la trama cada 2×3, siempre con el sistema de honor de las triadas de fondo (violento y de lo más crudo). De más está decir que hay misiones de relleno como suele pasar en GTA, que desvían la aventura del objetivo principal del personaje, pero aun así siguen teniendo más verosimilitud en el gameplay, lo que no hace más que mejorar la experiencia y no alargarla al pedo como hacía por ejemplo Mafia 3.

La jugabilidad 

Al menos a la hora de la pelea, si bien tenemos un sandbox, algo que caracteriza a Sleeping Dogs es lo propenso a las peleas cuerpo a cuerpo (cosa que en algún GTA se tornaría molesto, ya que está destinado al uso de armas más que a los enfrentamientos mano a mano). Si bien hay un sistema de disparos y manejo de vehículos, no hay un punto verdaderamente fuerte del juego en el que sean el centro de la acción. La física de manejo es una reverenda poronga y el sistema de disparos no se luce. La perspectiva en tercera persona desde el hombro derecho (al igual que Batman: Arkham Asylum o Max Payne 3) nos da una fluidez en las peleas que nos van a hacer la aventura bastante divertida.

Tenemos un sistema de combos variados, contraataques, tomas especiales, usar el entorno para acabar con los malos malosos, usar alguna que otra arma melee. Todo esto sirve para enfrentar a los enemigos que se nos presenten, que vendrán de a grupitos y tendremos que tener cierta habilidad para combatir sin recibir tanto daño (algo parecido a lo que pasa con Batman). Obviamente está la posibilidad de poder adquirir nuevas habilidades de combate durante el juego, esto se obtiene comprando boludeces de los puestitos callejeros con la guita que ganemos en las misiones, las mejoras de habilidades también pueden ser temporales (o consumibles) y nos convendrán a la hora de realizar ciertas misiones, ya que son variadas, no simplemente ir a cagar a piñas a tal o cual chinito. Ya que van desde ser un simple recado hasta persecuciones, a pie o en coches, carreras callejeras, peleas clandestinas, extorsiones o sabotajes, todo esto acompañado con escenas cargadas de acción al mejor estilo Hollywood.

La personificación de Wei será tanto en stats como visual; podemos comprar ropa para caracterizarlo como mejor se nos cante el orto, y también tenemos un árbol de habilidades que se irán desbloqueando a medida que ganemos experiencia, tanto como policía, como miembro de una triada y también tendremos un medidor de respeto. Obtendremos experiencia al terminar cada misión, las cuales son principales o secundarias, así como también podremos salir con minitas, ir al karaoke, chupar flores, etc. Tenemos un mapa bastante presentable, con una variedad bastante ínfima de vehículos (tanto motos como autos) aunque los temas de las radios están copados, que se yo… (por más que no entienda mucho el idioma).

También podremos comprar vehículos más pulentas y conseguir ciertos upgrades recolectando objetos únicos en el mapa, esto incentiva a la exploración y que te vuelvas pelotudo buscando las pedorradas esas (estatuas, santuarios y maletines).

En cuanto a la ciudad, está bien diseñada e incluso en las consolas el aspecto gráfico es bastante aceptable, cosa que era un problema en los sandbox anteriores. El apartado técnico está pasable así que no hay mucho que criticar.

Resumiendo, no es EL sandbox, eso nos queda bien asentado, sobre todo porque dura unas 15 horitas si lo jugamos a las chapas. El manejo y el sistema de disparos está a medias, pero el punto fuerte son las escenas llenas de acción, variedad de misiones y posibilidades de exploración en el mapa enorme, buenas peleas con combos espectaculares y la violencia exquisitamente puesta en escena. Seguramente el de Activision que tomó la decisión de vender los derechos de distribución del juego se habrá querido meter un tiro en las pelotas porque terminó cediendo flor de juegazo.

Sleeping Dogs

8

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8.0/10

Choni

Redactor, videoreviewer, jugador de TCG y fan de Pokemon.